Fase 1. La experiencia del entorno:
Me encuentro al aire libre, concretamente en un parque de la ciudad de Valencia. La temperatura es agradable. No hace mucho sol, mas bien está nublado. Escucho el sonido de las hojas de las palmeras agitadas por el viento. Es una sensación apacible, ya que no se encuentra muy cerca de las carreteras y es el único sonido que emite el espacio. Frente a mi, se disponen tres muros en paralelo. Tienen un grosor de unos treinta centímetros; dos de ellos están a la misma altura y el tercero se encuentra más elevado. El suelo es de goma, es un material reconocible por su uso en las estructuras de juegos infantiles, que transmite seguridad y delimita un espacio que incita al juego. Entre los dos muros, a la misma altura, se encuentra una rampa que da acceso a una sección del parque en un plano inferior. Las distintas alturas transmiten una sensación de separación y discontinuidad que facilitan la exploración de nuevos espacios y te invitan a pasar de un punto a otro, rebasando la rampa o incluso saltando al segundo.
He elegido este lugar por la gran variedad de movimiento. En el parkour, el rendimiento se divide entre las variantes que te ofrece el entorno y tus capacidades físicas, de esta forma, este espacio, me permite expresar el movimiento de muchas formas posibles. Es un lugar de entrenamiento perfecto.
En este sitio me siento a gusto ya que, por sus condiciones, hay mucha gente del ámbito de parkour que lo visita a menudo y transmite acogimiento y seguridad.
Es un entorno que me recuerda grandes momentos vividos.
El espacio destaca por la variedad de zonas que genera. El hecho de que esté construido en un terreno ascendiente, obliga a generar varios planos a distintos niveles y a la creación de muros que separan estos espacios. Eso puede llegar a percibirse como algo extravagante o disruptor, ya que en la zona donde está situado, la mayoría de parques son planicies, sin espacios delimitados.
A mi parecer, este parque comparte similitudes con otros lugares de entrenamiento de la ciudad de Valencia, pero el impacto emocional que generan en mi no es el mismo, por las experiencias vividas en el pasado. Por lo que creo que ahora mismo, no me sentiría igual en otro espacio.
Creo que los ocupantes de este lugar de ocio, están muy influenciados por las condiciones de este espacio, ya que da vida a la expresión y arte del movimiento del parkour, a la vez que una zona de juegos y exploración para los más pequeños.
En mi opinión creo que no cambiaria nada. Reúne las condiciones perfectas para ser un parque agradable y útil en muchos aspectos.
